Tirar del carro

Si echamos la vista cuatro meses atrás y comtemplamos el panorama del Real Madrid por entonces, podremos ver a un Lopetegui en apuros ante la visita de los suyos al Bernabeu. Con Vinicius fuera de la lista y Marcelo, Bale e Isco como titulares, los suyos salieron goleados del Nou Camp. A partir de ahí y tras la salida de Lopetegui, las miradas giraron hacia los jugadores blancos.
Marco Asensio, el jugador que hace pocos meses figuraba como uno de los candidatos a tomar el relevo de las grandes figuras madridistas de los últimos tiempos y sin duda un futbolista de mucha calidad y gran futuro, alimentó la polémica sobre quien debía entonces  tirar del carro del Real Madrid cuando las cosas vinieron mal dadas al inicio de la temporada. El mallorquín que a día de hoy apenas cuenta para Solari, hacía estas declaraciones :
"Yo no tengo que tirar del carro en el Madrid, hay jugadores más experimentados que deben hacerlo".
Cuando apenas han transcurrido noventa días de esas palabras, un imberbe Vinicius con apenas 18 años es el encargado de tirar del carro blanco. Si han oido bien...un juvenil es quien a día de hoy tira de un carro cargado con el lastre de haber perdido a un futbolista de más de 50 goles por temporada y haber fichado en su lugar a otro que tan siquiera  consigue entrar en las convocatorias. Chirrian los ejes , con varios futbolistas que parecen oxidados y un técnico que con el mismo Vinicius en el campo ocupaba hace esos mismos noventa días ocupaba el banquillo del Castilla en la Segunda B.
Ni Benzemá, ni Sergio Ramos, ni tan siquiera el reciente balón de oro, Modric, tiran de este carro blanco a día de hoy. Dicen que al Madrid le falta gol y que Vinicius no define ...que se lo digan a Florentino.La sombra de CR7 es todavía alargada sobre el palco de Concha Espina.

VINICIUS | Nada igual

Voy a ser ventajista. Antes de que se produjera su debut con Solari al frente del banquillo del Real Madrid, escribí esto (pincha aquí) después de muchos meses sin juntar letras en este blog.

Hoy, casi dos meses después, vuelvo a sentir la necesidad de aporrear el teclado para contar que el "ojo al dato" con el que finalizaba mi entrada sobre "Vini" se ha convertido hoy en un "al loro" que este ha llegado para quedarse.
Y es que desde entonces y aun con la cautela que hay que tener con los apenas dieciocho años del futbolista, todo ha cambiado y algunos han pasado de la guasa del Vinicius pa cuando...al Vinicius titular.

Su última actuación ante el Girona en la Copa del Rey, no hace más que confirmar que desde la irrupción de un tal Raúl Gonzalez Blanco en el primer equipo del Real Madrid, no se ha visto nada igual en la casa blanca. Provoca un penalti, da una asistencia y participa de manera vital en los otros dos tantos de su equipo. Una actuación adornada con algunas otras perlas del brasileño que se permitió desmarques, internadas por su banda, asociaciones, regates (caño incluido) y un trabajo defensivo nada desdeñable. Un auténtico recital, en una competición exigente y de máximo nivel. Faltó el gol, pero no desesperen, llegaran las dianas de este brasileño de tan solo dieciocho años que está aprovechando sus oportunidad tal como lo hiciera Raúl Gonzalez en su día. Falta por conocer si Vini, que ya lo ha igualado cuando menos en el arranque, marcará una época en el club como lo hiciera el 7 blanco, pero eso ya es harina de otro costal. Mientras tanto, disfruten.




En el primer gol realiza un movimiento de 9 puro, ataca el espacio y se sitúa libre de marca en el corazón del área pequeña

En el segundo de su equipo, recibe en el balcón del área, aprovecha el movimiento de Benzema a la espalda del defensor y se introduce entre los dos defensas para con un regate seco provocar penalti.

Si su aportación en los dos primeros goles fue decisiva, no lo fue menos en el tercero de los blancos. Penetra en el área arrastrando a cuatro contrarios, dejando a Marcelo libre al que le cede el balón que acabaría en centro del brasileño y el gol de Sergio Ramos.

La guinda a su estelar actuación la ponía el brasileño con una asistencia milimétrica para que Benzema hiciera el cuarto tanto de los blancos.